miércoles, 8 de enero de 2014

DOCTRINAS QUE DIVIDEN, Edwin Lutzer

DOCTRINAS QUE DIVIVEN
ERWIN LUTZER



CAPÍTULO 9
PREDESTINACIÓN O LIBRE ALBEDRÍO: AGUSTÍN CONTRA PELAGIO

La gente de nuestro tiempo no se siente muy inclinada hacia la reflexión teológica. En una época de religión popular, toda especulación acerca de la libertad de voluntad y la predestinación parece carecer de sentido. No obstante, para las mentes teológicas más grandes de la historia de la iglesia la respuesta que el individuo diera a esa pregunta determinaba si entendía o no el evangelio.

Todo empezó cuando un monje británico de nombre Pelagio expresó su distanciamiento de una afirmación hecha por Agustín. El punto de Agustín era muy simple; si Dios esperaba algo de él, Dios tenía que conceder lo que era esperado. En sí mismo, Agustín estaba demasiado encadenado al pecado como para guardar hasta el más básico de los mandamientos de Dios.

Agustín cayó en pecado moral y engendró un hijo ilegítimo, Adeodato. Cierto día fue expuesto al cristianismo por medio de la predicación de Ambrosio, un obispo de la iglesia. El envidiaba a quienes aparentaban ser capaces de dominar sus pasiones; así despertó su interés por el cristianismo.

Pelagio, no tenía ese mismo sentido de impotencia espiritual. Era un hombre bien disciplinado y estudiante de teología griega que creía que con un poco de ayuda de Dios el hombre podía mejorar su situación. Convirtió un joven llamado Celestio a su enseñanza, según la cual el hombre era capaz por su propia fuerza de guardar cualquier mandamiento que Dios le diera. Sería incongruente que Dios diera al hombre un mandato que no pudiese obedecer.

La piedra angular de la teoría de Pelagio era la libertad de la voluntad. Al verse enfrentado al tomar la decisión entre pecar o no pecar el hombre puede escoger cualquiera de las 2 decisiones.

Tanto Pelagio como Agustín estaban de acuerdo con que Adán fue creado con neutralidad moral y por esta razón hizo una elección libre cuando pecó. Sin embargo, Pelagio se adelantó a sostener que la caída de Adán solo le perjudicó a él y a nadie más. Enseñaba que la capacidad natural del hombre para guardar los mandamientos de Dios era de por sí una expresión de la gracia de Dios.

Pelagio continuaba afirmando la necesidad de bautizar a los infantes, aunque en su propia opinión la práctica es innecesaria. ¿Por qué deberían bautizarse los infantes si no son pecadores? Más adelante, el 1ro del 418 en Sínodo de Cártago afirmó que cualquiera que niegue que los niños recién nacidos han de ser bautizados para la remisión de pecados, sea anatema.

No obstante, debemos dar crédito a Pelagio por haber planteado la interrogante que sería objeto de serios debates: si el hombre no tiene libertad de obrar conforme a su voluntad, ¿cómo puede Dios hacerle responsable de sus acciones?

Agustín creía que Adán fue creado con la capacidad para no pecar, pero a causa de la caída el pecado se había convertido en algo inevitable. Creía que los infantes nacen y entran al mundo bajo la condenación del pecado de Adán y si los hombres se salvan solo es gracias a la intervención directa de Dios.

Mientras que el grito de batalla de Pelagio era “debo luego puedo”, Agustín exclamaba angustiado “debo pero no puedo”.

Surge la pregunta: ¿Por qué se salvan algunos hombres y otros no? La respuesta de Agustín es que Dios ha predestinado a algunos hombres a vida eterna. En cuanto a los que no se salvan, es porque están predestinados a condenación eterna.

Para Agustín, la voluntad del hombre no era libre como Pelagio había enseñado. Libertad significa que les es dada la gracia para compensar el peso de su pecaminosidad. La gracia cura la voluntad de tal manera que pueda amar la justicia.

Pelagio había definido el libre albedrío como la capacidad de escoger entre lo bueno y lo malo. Agustín no estaba deacuero y creía que la voluntad del hombr está esclavizada al pecado.

RESUMEN
Cuando Pelagio llego a creer en la capacidad humana, disminuyó la necesidad de la gracia de Dios. Cuando Agustín concluyó que el hombre había caído de una manera tan profunda que su voluntad estaba sometida al pecado en esclavitud, magnificó la necesidad de la gracia divina.
Como se podría esperar, el Pelagianismo fue condenado por la iglesia pero el pensamiento de Agustín tampoco fue aceptado del todo.
Por esta razón se adoptó composteridad una posición mediadora que trato de convinar estos dos sistemas teologicos divergentes.

SEMIPELAGIANISMO
Algunos teólogos trataron de rescatar los mejores aspectos de los dos extremos, estos hombres afirmaban que la soberanía de Dios y el libre albedrío del hombre operaban juntos en forma de antinomia. Agustín había resuelto el dilema a favor de la gracia y por eso tuvo que negar la libertad humana. Pelafgio lo resolvió a favor de la libertad humana y negó la gracia. El semipelagianismo prometía evitar ambos errores.
Aunque el semipelagianismo fue condenado en el Concilio de Orange en 529 d.C llegó a convertirse en la postura oficial de la Iglesia Católica Romana.

CAPÍTULO 10
PREDESTINACIÓN Y LIBRE ALBEDRÍO: LUTERO CONTRA ERASMO

El debate está centrado en la cuestión de si la persona no convertida puede contribuir de alguna manera a su salvación, bien sea debido a que tiene por naturaleza la capacidad de dar pasos en dirección ala vida de Dios por iniciativa propia, o porque Dios en su soberanía levanta a los que están muertos en delitos y pecados, y mueve sus voluntades para que reciban la verdad del evangelio.
Erasmo dijo que el hombre es debilitado y sus poderes quedan bastante inhabilitados, pero que no es del todo carnal. Su naturaleza posee alguna capacidad para el conocimiento y la obediencia a Dios.
Lutero veía esta postura como un abaratamiento de la gracia. El simple hecho de admitir que el hombre puede merecer l agracia divina mediante el ejercicio de su libertad de elección, disminuye el valor absoluto de la gracia de Dios. Si Erasmo tiene razón, un hombre se convierte y otro se pierde debido a que hay una diferencia entre ellos: al primero fue sensato y ejecritó su libertad de elección para optar por Cristo, mientras el último no lo hizo así. Lutero quería decir que un hombre se salva y otro se pierde debido a que solo Dios hizo la diferencia entre ellos.

EL DEBATE
1.     Erasmo supuso que todo lo que Dios ordena hacer al hombre, el hombre puede hacerlo. Lutero respondió diciendo que el hecho de que se nos diga que debemos amar al Señor nuestro Dios con todo nuestro corazón no significa que seamos capaces de hacerlo.

¿Por qué Dios da mandamientos que le es imposible guardar al hombre? Para llevarle al abatimiento que le permita abandonarse a la misericordia de Dios.

2.     Erasmo citó las palabras de Cristo en Mateo 23:37 “¡Jerusalén, Jerusalén que matas a los profetas, y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos como la gallina junta a sus polluelos debajo de las alas, y o quisiste!”.

En este punto Lutero hizo una distinción que era importante para entender su teología que exista por un lado la voluntad revelada de Dios y por otro el propósito secreto y oculto de Dios. Por un lado, Dios insta al hombre a que crea, pero por otro lado tiene planeada la condenación de muchos. Nos debemos preguntar por qué es así, tan solo quedar asombrados ante la gracia de Dios.

Si la salvación de todos lo hombres fuera su prioridad máxima, podría impedir que Satanás cegara los ojos de los no convertidos para que más estuvieran dispuestos a creer.
¿Se puede conciliar la visión de Dios con la misericordia de Dios? Lutero escribió: “Este es el grado más elevado de fe: creer que es misericordioso aquel que salva a pocos y condena a tantos”

3.     Erasmo explicó el caso del endurecimiento de Faraón diciendo que sus hechos malos le hicieron obstinado y Dios aumentó su maldad para que fuera llevado al arrepentimiento. De hecho, Pablo enseño con claridad que Dios no mostró misericordia a Faraón, no fuera que llegara al arrepentimiento (Ro. 9:17).

Lutero continuó diciendo que la voluntad humana es como una bestia; si Dios se sienta sobre ella va a donde Dios quiere. Si Satanás se sienta encima va a donde Satanás quiera. Sin embargo, la bestia carece de capacidad de elegir a su propio jinete. Los jinetes mismos son quienes luchan para ver quien se monta sobre la bestia.

CAPÍTULO 11
PREDESTINACIÓN O LIBRE ALBEDRÍO: CALVINO CONTRA ARMINIO

Calvino estaba de acuerdo con Lutero en que la voluntad de los no convertidos estaba atada a servidumbre. Los hombres son rescatados de esta esclavitud por Dios quien elige a algunos a vida eterna y otros a reprobación.

EL SÍNO DE DORT
Fue convocado en los países bajos en 1918 al reto de Arminio. El sínodo rechazó de manera energica la postura de los manifestantes arminianos. Y adoptó los cinco puntos del calvinismo. La razón de que tan solo algunos miembros de la raza de seres humanos pecadores vienieran a la fe, según concluyó el Sínodo, debe atribuirse al consejo eterno de Dios.

CONTRASTE DE LOS CINCO PUNTOS
1.     Miseria total del hombre.
Debido a que el hombre está muerto en delitos y pecados, Dios debe regenerarle hasta concederle la fe que necesita para creer.
El arminianismo dijo que le hombre está enfermo; el calvinismo dijo que le hombre está muerto.

2.     El sínodo afirmó que la razón que algunos se salven es que Dios les eligió para vida eterna.
Otros son condenados a la muerte eterna.
Los arminianos arrancan con que Dios no es quien inicia la elección, sino que los creyentes optamos por ser elegidos.
La realidad de la cuestión es que no queda mucho espacio para posturas intermedias. O bien Dios nos eligió por propia iniciativa, o nos eligió porque nosotros le escogimos.

3.     Expiación limitada.
Esto significa que Cristo no murió por todos los hombres en general sino que solo se entregó por la Iglesia, la comunidad de los elegidos.
Spurgeon dijo que si Cristo murió para redimir a todos los hombres y a pesar de ellos solo algunos se salvan, la muerte de Cristo es en gran medida un fracaso.
Los esposos deben estar dispuestos a morir por sus esposas, así como Cristo murió por la Iglesia. Ninguna de ellas estaría dispuesta a morir por amantes fraudulentas.

4.     Gracia irresistible.
La frase significa que cuando Dios aplica su gracia salvadora a los elegidos, siempre es efectiva.
La gracia de Dios tarde o temprano, siempre va a vencer la gracia de los elegidos.
En contraste, los erminianos creen que la gracia salvadora es dada a todos los hombres y puede ser resistida.

5.     Perseverancia de los santos.
Históricamente, significa que los santos van a perseverar en su fe. Ninguno de los elegidos se perderá.

ACLARACIONES

Objeción n° 1. Dios dirige a tal punto la voluntad humana que todos quedamos reducidos a robots.
El hombre tiene emociones, una mente que puede pensar y también una voluntad que puede tomar decisiones. Reducir el hombre aun títere, equivale a despojarle de su dignidad.
Dios obra en la vida de aquellos que han de hacer salvos, convenciéndoles de pecado y dándoles la fe para creer el evangelio. El cambio su disposición para que se salven porque así lo quiere.
El calvinismo dice que nosotros respondemos porque Dios a inclinado nuestra voluntad para que le escojamos.

Objeción n° 2. ¿Cómo puede el hombre ser responsable de sus acciones si no tienen libre albedrío?
Lutero dijo que solo cuando los hombres se dan cuenta de que Dios los considera responsables hasta por lo que no pueden hacer, se ven inclinados a abandonarse a la misericordia de Dios.

Objeción n° 3. El calvinismo hace incongruente a Dios. El ofrece el evangelio de todos los hombres, pero no todos pueden creer.
La voluntad revelada era que todos los hombres fueran salvos, pero la voluntad oculta era que la mayor parte de la humanidad fuera condenada. Los erminianos dicen que no solo esto generóo conflicto en la naturaleza de Dios sino que da razón para creer que Dios es engañoso. ¿Acaso Dios da a los hombres una invitación sabiendo que ellos no la pueden aceptar?

Objeción n° 4. ¿Cómo podemos armonizar “Dios eligió algunos” con “Dios desea que todos se salven”?
Existe una diferencia entre el decreto de Dios y el deseo de Dios. Dios no se deleitó en la muerte de su hijo. Podríamos decir que no estaba dispuesto a que su hijo muriera con tal sufrimiento y agonía sobre la cruz. Sin embargo, el decretó que tenía que suceder. Ese propósito prevaleció sobre su deseo de ver a Cristo exento de cualquier sufrimiento.

Objeción n° 5. ¿Por qué Dios no los eligió a todos?
El calvinista cree que Dios no estaba en la obligación de salvar a uno solo. Si salva a algunos, eso tampoco lo pone bajo la obligación de salvar al resto.
Dios no trata a todos por igual, el no se apareció a Hammurabi de la misma manera que se apareció a Moisés; Dios dio bendiciones a Israel que no dio a Persia. En el plan de Dios no hace mal una sola cosa. El jamás comete injusticias.

CAPÍTULO 12
PREDESTINACIÓN O LIBRE ALBEDRÍO: WITFIELD CONTRA WESLEY

Wesley insistió en que el calvinismo enseña que por decreto de Dios la mayor parte de la humanidad es condenada  a muerte sin posibilidad alguna de redención; nadie puede salvar esta vasta multitud excepto Dios, y él no está dispuesto a hacerlo.
Luego concluyó que esto haría vana toda la predicación del evangelio. Es necesaria para los que son elegidos y es inútil para quienes no lo son. En efecto, tal situación hace inservible la predicación del evangelio.
Apeló al hecho de que el evangelio es ofrecido a todos los hombres, y eso para él era prueba suficiente que es el hombre y no Dios quien hace la elección acerca de quién es esa moral.

DEBILITAMIENTO EN EL CALVINISMO EN NORTEAMERICA
Si el calvinismo murió en 1855, fue debido en gran medida a la influencia de Finney en los avivamientos. En su reacción frente al calvinismo de su tiempo, minimizó la necesidad de la gracia de Dios en la salvación. Para él, el hombre tiene el poder para determinar su propio destino.

LAS VENTAJAS DEL ARMINIAMISMO

Ventaja n° 1. Dios nunca ordena sino que solo lo permite a causa del libre albedrío de sus criaturas. El arminianismo protege la reputación de Dios y el calvinismo la destruye.

Ventaja n° 2. Dios salva a todos los que puede. Es más compatible con el amor de Dios que la visión de que eligió solo a unos cuantos para vida eterna.

Ventaja n° 3. El arminianismo fundamenta la evangelización; el calvinismo conduce al fatalismo.

¿QUÉ ENSEÑA LA BIBLIA?
Lo que es importante entender es que el calvinismo y el erminianismo son dos sistemas de teología que no pueden ser armonizados; o bien Dios hizo la elección en cuanto a quienes se va a salvar y luego concede al hombre la capacidad para creer, o la elección es hecha por el hombre. O bien los elegidos están siendo salvados, o Dios está salvando a cuantos puede pero está fracasando en sus propósitos. O bien Dios ha ordenado todo lo que sucede, o a causa del libre albedrío del hombre, lo mejor que puede hacer ahora es ajustarse a las cosas malas a medida que suceden.

CAPÍTULO 13
¿PUEDE CONDENARSE UNA PERSONA SALVA?

Que usted crea o no en la seguridad eterna depende de la postura que tome en la controversia sobre el libre albedrío. Quienes dicen que la salvación solo depende de nuestra elección por lo general llegan a la conclusión lógica de que podemos perder nuestra salvación. El libre albedrío que acepta a Cristo es el mismo libre albedrío que le puede rechazar. Es mi opción ser salvo y también es mi opción ser “no salvo”.
Ahora, ¿en qué momento preciso una persona cruza la línea divisoria y pierde su salvación? Entre los muchos grupos que enseñan esta doctrina, hay por lo menos tres respuestas que se ofrecen. La primera dice que soy salvo hasta que peco de nuevo; en ese momento pierdo mi salvación. La segunda dice una persona pierde su salvación cuando comete pecado de manera consciente y voluntaria. Esa clase de pecado solo se puede cometer cuando la persona 1) es desobediente a sabiendas y 2) se niega a confesar el pecado. Algunos también añaden 3) debe ser un acto no un mero pensamiento pecaminoso.
En tercer lugar hay algunos que creen que solo aquellos que caen en apostasía se perderán.

SEGURIDAD CONDICIONAL
Algunos calvinistas, con el fin de preservar la doctrina de seguridad de la vida eterna han enseñado que las personas de quienes “recayeron” son aquellos que se beneficiaron de la fe cristiana pero no la acogieron por decisión personal.
Ni los miembros de la iglesia, ni los elegidos pueden ser salvos a menos que perseveren en la santidad y no pueden perseverar en la santidad sin esfuerzo y vigilancia constantes.
La conclusión es que ambas partes del calvinismo están de acuerdo con la cuestión central: todos los creyentes verdaderos serán salvos. Lso arminianos no están de acuerdo.

SEGURIDAD INCONDICIONAL
Enseña que el Dios quien eligió a los suyos para vida eterna no perderá a uno solo de ellos; los que han sido redimidos por la sangre de Cristo serán salvos con toda seguridad.
Los arminianos dicen que ningún enemigo nos puede arrebatar de la mano de Dios, nosotros si somos capaces de salir de la mano del Padre con nuestra desobediencia. Vinimos a Cristo por nuestra propia voluntad y podemos salir de la misma forma.

DOCTRINA DE LA CERTIDUMBRE
Creer que los elegidos serán salvos es una cosa; saber que uno es sin lugar a dudas miembro de esa compañía es algo muy diferente.
Decir que las doctrinas de seguridad y certidumbre eternas conducen a la mundanalidad, equivale a no entender el cambio profundo y radical que produce la conversión. El espíritu cambia la disposición y los deseos del pecador, de tal modo que los placeres del mundo pierden su atractivo.
Al mismo tiempo Dios disciplina a quienes viven en pecado deliberado por medio de las consecuencias inevitables del pecado y a través de las experiencias difíciles de la vida que hacen volver a sus hijos con la comunión con su Padre.
Dios no toma con ligereza la responsabilidad que los creyentes tienen de vivir a la altura de su llamado.