martes, 11 de octubre de 2011

¡AYUDENME! TRABAJO EN LA ESCUELA DOMINICAL Ray Johnston


¡AYUDENME!
TRABAJO EN LA ESCUELA DOMINICAL
RAY JOHNSTON


C.R.E.A.
C- contenido
R- relaciones
E- experiencia
A- accion

C- ¿Qué quiero comunicar?
R- ¿Cómo hacerles sentir especial? Cumpleaños, graduaciones, etc.
E- ¿Cómo pueden experimentarlo en su vida cotidiana?  NO es enseñar para que aprendan, sino que cambien su vida con lo que aprenden.
A- ¿Qué podemos hacer para que no olviden esta verdad?

-          Quiza por ahora no veamos frutos de toda nuestra labor en la escuela dominical, pero ellos nos necesitan!
-          Respondamos las preguntas que los alumnos nos hacen: enseñemos de los temas que los aquejan.
-          Mantengamos las expectativas; innovemos!
-          Puede ser que nos encariñemos con los chicos
-          Ante la duda, digamos: no se
-          Probemos con cosas fuera de lo comun.
-          Disfrutemos en clase juntos: juegos
-          Mejorar es bueno: preparemos buenos programas!
-          Dejemos a los alumnos elegir los temas.
-          Incluyamos actividades practicas en la vida cotidiana: Hablemos en su idioma!
-          Romapamos espejor y abramos ventanas: hagamos juntos actividades para otros: estar afuera para aprender compasión, aires libres, folletos, etc.
-          Invitemos a los expertos: invita a otras personas expertas a enseñar temas especificos en tu clase.
-          NO todos son iguales: diferenciemos!
1.       Causal: los que aun no son seguidores de Jesús. Tienen un nivel de interes espiritual bajo.
2.       Curiosos: los que han comenzado una relacion con Cristo y estan interesados en lograr un crecimiento espiritual.
3.       Comprometidos: los que siempre estan dispuestos a servir.
-          el cambio no es facil: hagamos ciertas variaciones!
  1. diferentes posiciones en los asientos
  2. diferentes salones
  3. cambiemos la rutina de la leccion:
    1. cambiemos materiales
    2. cambiemos lugares (patio, auto, oficina, etc)
    3. cambiemos maestros
  4. musica o comida
-          “pequeño” puede ser una bella palabra: al tener un grupo pequeño, se hara mas facil disfrutar tiempo de calidad con cada uno de los alumnos, por ejemplo salidas a comer, limpiar la cuna, etc.
-          ¡felicitaciones! ¡eres un ejemplo! : pequeñas actitudes de amabilidad, gentileza, escuchar, recordar cumpleaños, llevarlos a sus casas, mostrar buena disposición para brindarles lo que podamos.
-          Generemos un lugar de pertenencia:
    1. videos
    2. sillas en circulo
    3. laminas de proximos eventos
    4. fotos de retiros
    5. juegos de mesa
    6. comida
-          el desacuerdo puede resultar enriquecedor: enseñe como deberian pensar, NO que deberian pensar. Hagan debates.
-          Ocasionalmente todos fallamos: esperemos grandes cosas de los alumnos.
-          Demos participación a toda la clase: abran una “agencia de tarjetas”, etc.
-          Mantengamos a los adolescentes en un nivel de participación: debates, conversaciones, mesa redonda, etc.
-          Busquemos un nombre con onda para la clase.
-          No declaremos, descubramos! : no des respuestas, haz preguntas.
-          Dios no creo el franelografo! : rompe la rutina!
-          Vivamos una ventura: vive por medio de paseos,etc.
-          A la calle! La clase podria tener lugar en:
a.       sala de nuestra casa
b.       restaurante local
c.       efocina del pastor
d.       cementerio, si se requiere para hablar de la vida eterna, es buena idea!
e.       Basurero, para hlablar del materialismo
f.         Asilo, para hablar de la compasión
g.       Cafeteria, alimentacionde los 5000.
-          que los locos dirijan el loquero: que comiencen poco a poco a tener responsabilidades
-          es bueno que nos resulte divertido: maestros riendo y divirtiendose prefleja el gozo del Señor en su rostro.
-          Mantengamos un cuaderno de oracion: de la clase con fotos de los alumnos, peticiones de cada alumno, etc.
-          Aprendamos de los alumnos: quiza haya cosas que saben hacer, que lo compartan con toda la clase no es mala idea.
-          Dejemos a Dios pelear sus propias batallas: tenemos batallas como enseñar verdades espirituales, a veces no estamos contentos porque la clase no salio como esperabamos, a veces nos sentimos fracazados porque los alumnos no aprendieron. Dejemos a Diso actuar en su propio campo, el es el unico que puede hacer todas las cosas.
-          La leccion: debe estar en su idioma! Y ser lo mas explicita posible.
“luego Jesús llevo a sus discipulos….  Mt.5 Las Bienaventuranzas.
Simon Pedro dijo: ¿se supone que debemos saber todas estas cosas?
Andres pregunto: ¿tenemos que tomar nota?
Santiago añadio: ¿tendremos examen de esto?
Felipe declaro: no tengo papel
Y Bartolomé inquirio: tenemos que traducirlo?
Juan señalo: los otros discipulos no necesitan aprender esto.
Mateo pidio: ¿puedo ir al baño primero?
Y judas acoto: ¿Qué tiene que ver esto con la vida real?
Entonces uno de los fariseos que estaba presente le pidio a Jesús ver el bosquejo de su leccion y le reclamo: ¿Dónde estan los organigramas y los bosquejos cognoscitivos de la leccion?
Y Jesús lloro”.


      -   luz, camara y accion:
a. dejales grabar un documental del tema del mes
b. hagan encuestas
c. actuen historias biblicas
d. usa esto como introducción antes de la clase.

-          escuchar es una buena manera de comunicarnos. Salir con ellos una vez al mes, hablar sobre algo, escucharlos en el transcurso.
-          El poder del amor: llama personas o alumnos en cumpleaños u ocaciones difíciles, enfermedades, con todos los de la clase, se sentiran muy bien!
-          Ofrezcamos creditos extras: biblioteca, cintas, videos para alumnos que quieran aprender mas.
-          Cambio de cara: invitar a enseñar
-          Presentemosles desafios
-          Encendamos la pantalla: videos, grabaciones, noticias para debatir.
-          Son importantes para Jesús y lo perciben a traves de nosotros!
-          Si podemos ser creativos: busca material, investiga, lee, averigua, dedica tiempo.
-          Tambien nosotros podemos ser personas con onda: actualizate!
-          Cuando todo falla: confiemos en Dios!
-          Quiza los resultados no se vean ahora, pero después quiza!

lunes, 10 de octubre de 2011

LA GRAN OMISION, Steve Saint

 
LA GRAN OMISION
STEVE SAINT

CAPÍTULO UNO

LO QUE EL HOMBRE ENCAMINÓ PARA MAL,
DIOS LO ENCAMINÓ PARA BIEN.

El escenario se ubica En una franja de arena en el río Ehuenguno (llamado Curacay en los mapas) para esperar un segundo encuentro con esta tribu, conocida como los “Aucas” o “salvajes desnudos,”

Por meses, en un intento de cumplir un deseo y obligación que habían aceptado de Cristo siendo jóvenes Jim Elliot, Roger Youderian, Ed McCully, Pete Fleming  Nate, habían buscado a los escurridizos “Aucas.”  fueron alanceados por los waodanis en 1956.

 Lo que los cinco foráneos estaban intentando hacer para Dios y para los waodanis no tendría éxito. Pero Dios usaría su fracaso para tener un éxito mayor ¡que nunca podrían haberlo imaginado!
Lo que los seis guerreros encaminaron para mal, Dios lo encaminó para bien.

después de que fueran asesinados estos cinco jóvenes misioneros, Dios abrió puertas para que Elisabeth Elliot y  Rachel Saint, vayan a vivir con los waodanis y  ellos oyeron el Evangelio de Jesús y muchos comenzaron a caminar por los senderos de Dios.


Pero por toda la influencia que la historia de los waodanis ha tenido y por todo el esfuerzo misionero que ha inspirado, la iglesia ha perdido una lección crucial de la Gran Comisión que los waodanis han aprendido dolorosamente: En una trágica ironía, los esfuerzos sacrificados de muchos creyentes en nombre de los waodanis casi destruyen la misma iglesia que aquellos dedicados creyentes trabajaron para plantar.

Comencé a ver lo que ser “receptores” había hecho con un pueblo orgulloso al que alguna vez conocí como “dadores.” habían crecido cada vez más dependientes de las medicinas de afuera, mercancías, aeroplanos, escuelas, comunicaciones radiales y dinero. ¿Cómo es que los esfuerzos de creyentes han tenido tal efecto diferente al que esperaban? ¿Podría la ayuda causar daño? Si los métodos actuales de misiones son efectivos, los waodanis deberían haber sido nuestras estrellas en la historia del éxito.

El modelo podría ser resumido como “Alimenta al mundo con el pescado espiritual.” Eso es una simplificación excesiva, pero como generalización no está muy alejada de la realidad. Por otro lado nuestra comisión es más como “¡Distribuye muestras del pescado espiritual y luego entrena a aquellos que quieren más pescado! ¡Y enséñales que enseñen a otros a pescar!” En otras palabras, el propósito de la misiones es plantar iglesias oriundas que se propaguen, gobiernen y sustenten por sí solas.


NO ES LA GRAN OPCION
No podemos abrigar la esperanza de cumplir nuestra Gran Comisión a menos que reconozcamos nuestra gran omisión. No todos los creyentes pueden o deberían ser misioneros, pero cada creyente, sin importar su educación o capacidad económica – o dones naturales o espirituales, tiene un lugar en las misiones.

no se requerirá de cientos o miles más, sino millones más de cristianos para cambiar la marea en este nuevo siglo y llevar el mensaje del Evangelio a los tres mil millones de personas que todavía necesitan escucharlo.

Hay millones de creyentes oriundos en todo el mundo. La mayoría de ellos necesitarían ser entrenados y equipados. . Ezequiel 33 sugiere que somos los atalayas a los que se nos ha confiado alertar al pueblo que el enemigo viene. O prestan atención a nuestra advertencia y son salvos, o ignoran la advertencia y mueren. El advertir a todo el mundo que el pecado va a matarlos y luego explicarles cómo conseguir el remedio, es una gran tarea.

LO QUE ES Y NO ES MISIONES
1.                  El propósito de las misiones no es evangelizar La comisión para la iglesia es evangelizar el mundo. El propósito de las misiones es plantar la iglesia donde necesita existir y así pueda evangelizar el mundo.
2.                  Las misiones son como un andamio usado para levantar un edificio. Es solamente temporal el prestar apoyo hasta que la estructura pueda pararse por sí sola. Luego es retirada y llevada a otra locación donde se le necesita.
3.                 


Evangelizar el mundo es como una carrera en postas. En las áreas donde no hay iglesias, los misioneros corren la primera vuelta. Luego debemos pasar la posta a los creyentes locales para que terminen la carrera.

Hay muy poquísimos misioneros para evangelizar el mundo. Hay muy pocos misioneros para incluso plantar iglesias entre cada uno de los miles de grupos de personas que no tienen ningún testigo. Pero si plantamos la iglesia tan pronto como podamos, y si les enseñamos a enseñar a otros y cómo enseñar a otros, entonces podemos alcanzar al mundo para Cristo y cumplir nuestra comisión.

Qué hermosa demostración en la que gente de diferentes “mundos” unidos en Cristo pueden trabajar juntos para hacer que el ofrecimiento de perdón de Cristo sea conocido por las personas en todas partes.



CAPÍTULO DOS

¿ES ÉSTA UNA MISIÓN IMPOSIBLE?

Nuestro trabajo es muy grande como para acabarlo…
¡Haciéndolo a nuestra manera!

LOS NÚMEROS DETRÁS DEL MARKETING
¿Cuán grande es el mercado para lo que Dios ofrece? Realmente, ¿cuán grande todavía puede ser el mercado para el ofrecimiento de Dios después de todo el tiempo y esfuerzo que hemos invertido en publicarlo por los últimos dos mil años?

hay un gran mundo allá afuera. Aproximadamente hay seis mil millones de personas hoy en día. La figura es tan grande que el número que actualmente representa es difícil de imaginar.



¿Realmente comprendemos el número de personas que hay en el mundo ahora mismo y que no saben quién es Jesús o lo que Dios ofrece a través de Su Hijo? ¿Cómo podría suceder? Con los números actuales uno se queda helado.
De los seis mil millones de personas de hoy en día, aproximadamente uno de cada diez dice ser cristiano. Es difícil señalar los números específicos, pero como están las cosas, sólo aproximadamente la mitad del resto de la población del mundo tiene una oportunidad real de oír el ofrecimiento de Dios.

Si un grupo de personas quiere alcanzar yendo más allá de los caminos, usualmente tendrán que ir más allá del alcance de la electricidad, el transporte comercial y los medios de comunicación. Aproximadamente hay ochocientos millones de personas como nosotros que también no han tenido acceso al Evangelio. Ellos son generalmente las personas más difíciles para llevarles el mensaje de Cristo porque usualmente están ocultos detrás de la barrera geográfica y del idioma.

Cuando Jesús estaba en la obra y las multitudes le seguían, les dijo a Sus discípulos, “La mies es mucha, pero los obreros pocos. Por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies” (Mateo 9:37-38). En ese momento Jesús estaba entrenando a Sus doce discípulos y estaba designando otros setenta a quienes envió de dos en dos (Lucas 10:1).

la Gran Comisión está mucho más involucrada con simplemente distribuir literatura cristiana. Combine el concepto de la comisión de Cristo para Su iglesia, encontrados en los cuatro Evangelios, y parafraséelo, luego terminará con algo como esto.

Dios, mi Padre, me envió (Juan 20:21) para representar Sus intereses en la tierra y me dio Su autoridad en el cielo y en la tierra para hacer el trabajo (Mateo 28:18). Con Su autoridad yo los estoy enviando (Lucas 10:3) como mis representantes. Cada grupo de personas debería oír eso para que entiendan completamente del arrepentimiento para el perdón de los pecados (Lucas 24:47). Así que vayan al mundo entero y enseñen a todos en todo lugar. ¡Aquellos que crean y sean bautizados serán salvos! Asegúrense de explicar cuidadosamente que cualquiera que no crea va a ser condenado (Marcos 16:16). Luego entrenen a aquellos que hayan decidido seguirme – hombres, mujeres, chicas y chicos de todo el mundo. Enséñenles cómo hacerlo por ellos mismos (Mateo 28:20).


SOLUCION A LOS NUMEROS


la solución requerirá un cambio del paradigma para regresar a la estrategia que Cristo enseñó y que la iglesia primitiva la enseñó muy efectivamente. La solución está contenida en la Gran Comisión. Jesús nos mandó ir por todo el mundo, predicar a toda creación, hacer discípulos de todas las naciones y bautizar a aquellos que crean. ¡Pero no dijo que teníamos que hacerlo todo solos! Es numéricamente imposible que los misioneros evangelicen, discipulen y pastoreen todo el mundo. Jesús concluyó la Gran Comisión diciendo “Enseñen a todos que hagan lo que les estoy diciendo que hagan” necesitamos cambiar nuestro pensamiento para acomodar el hecho que no podemos cumplir la Gran Comisión por nosotros mismos. No podemos sumar a todos al reino; tenemos que multiplicarlos.

El alcanzar nuestro mundo con el Evangelio de Jesucristo puede llevarse a cabo, pero se requerirá un cambio en nuestro pensamiento para lograrlo. Volver atrás a la estrategia que Cristo propuso hace posible que los Mincayes del mundo también estén involucrados. ¡Verdaderamente es posible! Quizá todos necesitemos apuntar un poco más alto y soñar un poco más en grande.


CAPÍTULO TRES

EL ENGAÑO DE LA DEPENDENCIA

LAS BUENAS INTENCIONES PUEDEN MINAR LA IGLESIA QUE SOMOS ENVIADOS A PLANTAR


EL CICLO DE LA DEPENDENCIA
El propósito de las misiones es plantar iglesias locales que se propaguen, gobiernen y sustenten por sí solas. Lo que sucede con regularidad es que en lugar de plantar iglesias locales, terminamos transplantando nuestra propia iglesia a un nuevo escenario donde no encaja. Como la sustentamos, sentimos que debemos gobernarla para proteger nuestra inversión. Cuando gente de ese país ve una iglesia que fundamos y controlamos, llegan a la conclusión que es nuestra iglesia. Si ellos trabajan para traer gente a nuestra iglesia, esperan recibir dinero por ello. Fingimos tener una iglesia para ellos y ellos fingen apreciar lo que hemos hecho. Frecuentemente el resultado verdadero es el resentimiento a los misioneros y al Evangelio.

El paralelo incluso va más lejos. Los nacionales perceptivos son ávidos en pensar que la dependencia competitiva es preferible a la dependencia impotente, así que frecuentemente invitan a otros misioneros a trabajar en su área. Ahora pueden hacer jugar a una misión en contra de la otra, así como sus gobiernos hacer que las organizaciones de ayuda extranjeras jueguen la una contra la otra. Y todo muy a menudo funciona.

La dependencia no es solo una de las barreras más frecuentes del diablo para detener el esparcimiento del mensaje de Cristo del perdón, sino que es una de las de más larga duración. Una vez establecida es extremadamente difícil romperla.

Cuando, en  nombre de la comisión de Cristo, hacemos por los creyentes locales lo que ellos pueden y deberían hacer por sí solos, socavamos la misma iglesia que Dios nos mandó plantar. Es entendible que cometamos errores, pero no tiene excusa que el error de crear dependencia se haya convertido en la regla y no en la excepción.

La iglesia de Cristo es un organismo que está constituida de creyentes que trabajan juntos bajo una estructura y autoridad instituida por Dios para llevar a cabo ciertas funciones que los individuos no pueden lograr por sí solos. Esa es la razón por la que Dios da diferentes dones espirituales a los individuos cristianos (Romanos 12 y 1 Corintios 12). Él quiere que trabajemos juntos. su función es “capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”

La dependencia no sólo daña a la gente que se convierte en dependiente, sino que pone una gran carga sobre la gente de la cual dependen. La dependencia debilita tanto al que recibe como al que envía. Otra característica maliciosa de dependencia es que se desarrolla mucho más fácil y más rápido de lo que se puede curar.

el mejor remedio para la dependencia es la prevención. Es mucho más fácil darle algo a alguien que enseñarles a hacerlo, así como es más fácil darle pescado a la gente en lugar de enseñarle a pescar. Si le da un pescado a un hombre, lo ha alimentado por un día y probablemente creó los principios de dependencia. Si lo alimenta por muchos días y luego deja de hacerlo, él se molestará por ello. Pero si le enseña a pescar, lo ha alimentado toda una vida y le ha dado la capacidad de alimentar a otros.

CAPÍTULO CUATRO

¡ELLOS SÍ TIENEN LO QUE SE REQUIERE!

¡SALDOS BANCARIOS Y TÍTULOS COLGADOS EN UNA PARED NO SON LAS CALIFICACIONES PRIMARIAS PARA SERVIR A DIOS!

NUNCA SUBESTIME LA CAPACIDAD DE OTRA PERSONA
Cuando Anás y los otros cabecillas políticos y religiosos llamaron a Pedro y Juan para ponerlos en su sitio, ellos sabían que Pedro y Juan “eran sin letras y sin preparación” (Hechos 4:13). Ellos también habían asumido erróneamente que sin letras era lo mismo que ignorantes.

Luego se dieron cuenta que las calificaciones que tenían estos hombres simples con respecto a la predicación efectiva, valentía ante las autoridades terrenales y la capacidad de orar para que la gente se sane, no venía de una experiencia en clase y no dependía de un título que podía estar colgado en una pared. Pedro y Juan fueron vistos como que tenían lo que se requiere porque “habían estado con Jesús” (Hechos 4:13). Y no estarían intimidados para guardar silencio. Ellos les dijeron a los líderes religiosos, “Vosotros mismos juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque nosotros no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído” (Hechos 4:19-20).       


Dawa, una analfabeta y abuela vieja de la edad de piedra, comparte junto con Pedro y Juan la carencia de educación y entrenamiento formal. Pero ella y su esposo, Kimo, sirven bajo la misma comisión impuesta a usted y a mí, “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15), “y haced discípulos de todas las naciones” (Mateo 28:19). Ellos también tienen acceso al mismo poder con el que Pedro y Juan sanaron al cojo. La promesa de Hechos 1:8 – “recibiréis poder cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros; y me seréis testigos… hasta los confines de la tierra” se refiere a los seguidores waodanis de Dios tanto como a cualquiera de nosotros.  

¿QUÉ PODEMOS HACER?         
Pablo dijo, “digo a cada uno de vosotros que no piense más alto de sí que lo que debe pensar, sino que piense con buen juicio, según la medida de fe que Dios ha distribuido a cada uno. Pues así como en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo en Cristo e individualmente miembros los unos de los otros” (Romanos 12:3-5).

Dios ha comisionado a cada uno de Sus seguidores, y a través del Espíritu Santo todos tenemos lo que se requiere. Pero sólo podemos hacer la obra si trabajamos unidos como un cuerpo – poniendo lo que tenemos que ofrecer en una olla bajo el liderazgo unido de Jesucristo.


CAPÍTULO CINCO

TECNOLOGÍA – DEL PREJUICIO A LA ASOCIACIÓN

¡SE NECESITAN NUEVAS HERRAMIENTAS PARA ALUMBRAR NUEVOS SENDEROS EN NUEVOS LUGARES!

Como misioneros, nuestro propósito no es cambiar la cultura de uno, sino ofrecer a las personas una oportunidad de adoptar una nueva vida con nuevos valores y actitudes..

¿QUÉ HACE QUE LA TECNOLOGÍA SEA APROPIADA?
Al ver a Mincaye creer que podía volar un helicóptero porque alguien que se parecía a él podía hacerlo me ayudó a darme cuenta cuán importante es que las personas locales estén convencidos que pueden usar las herramientas que pueden ayudarlos a llevar a cabo su rol en la comisión de Cristo. Pero no es suficiente que ellos crean que puedan usar las herramientas; tienen que poder usarlas.

La tecnología debe ser apropiada para la gente que la va a usar. La tecnología usada por las misiones para plantar iglesias locales debería ser utilizable, sostenible y accesible para los creyentes locales a fin de que el proceso de crecimiento de estas iglesias tenga éxito una vez que se vayan los misioneros.

Nosotros podríamos ser la nación más rica y los cristianos más ricos sobre la tierra, pero esa no es una buena razón para darle algo a alguien. Brevemente, aquí hay varias razones:

  • No hay Valor: Es mucho más difícil apreciar el valor de algo que no nos cuesta nada.
Como consecuencia, no dura mucho.
  • Devaluación Personal: Si a la gente siempre se le da cosas, ellos comienzan a esperar cosas, y de ese modo niegan los sueños o aspiraciones personales de escalar desde su condición actual. El estar siempre en el lado de recibir anima a los creyentes locales a verse a sí mismos como incompetentes, incapaces de aprender aunque tuviesen deseos de hacerlo.
  • El Deseo se convierte en Necesidad: El darle algo a alguien puede dar como resultado que todos los demás quieran algo también. Similar, pero más importante, es la posibilidad que si el primer regalo prueba ser efectivo, repentinamente habrá una legítima necesidad de muchos más. Y si no puede dar la misma herramienta a todos, es mejor no darlo a nadie. Ayude a que sea accesible y todos puedan comprarse el suyo propio.

.
La Gran Comisión no es un deporte para espectadores. Necesitamos revisar cada proyecto de construcción de iglesia local para estar seguros que el andamiaje de la misión no está siendo adherido permanente e inadvertidamente a la estructura. Para ser eficiente y obediente, necesitamos mover el andamiaje lo más pronto posible, lo cual es casi siempre más pronto de lo que pensamos. Recuerde que el Espíritu Santo que supervisa a los misioneros en la fase de la plantación de la iglesia es el mismo Espíritu Santo que supervisa a los creyentes indígenas en las fases de construcción, mantenimiento y reproducción.

El mensaje del amor de Dios se propagará más rápido si hacemos Su voluntad a Su manera. Esto requiere dar a los necesitados espiritualmente el pescado espiritual, enseñándoles a pescar para que puedan alimentar a otros y luego enseñándoles que enseñen a otros a hacer lo mismo (Mateo 28:18-20). Este es el ciclo de multiplicación en funcionamiento. La Gran Comisión es una carrera de postas. Si olvidamos decirles a los creyentes en países en vías de desarrollo que son una parte vital de la carrera, terminaremos teniendo que correr su parte así como la nuestra. Sería inteligente de nosotros que gastáramos más tiempo y recursos entrenando y preparando a nuestros socios locales de la carrera en lugar de hacer lo que actualmente hacemos. Esto significaría un poco de menos tiempo para nuestra propia carrera, y sin duda, parecerá inconveniente algunas veces. Podría tomar más tiempo del que queremos, pero es la única forma de ganar la carrera.   


CAPÍTULO SEIS

¿PUEDE GENTE DE LA EDAD DE PIEDRA USAR TECNOLOGÍA DE LA EDAD ESPACIAL?

¡NO TIENEN QUE SABER LEER Y ESCRIBIR PARA VOLAR AVIONES Y ARREGLAR DIENTES!

en las misiones hay herramientas que son usadas a menudo de las cuales no nos damos cuenta de su importancia: autos, aviones, computadoras, teléfonos, radio transmisor-receptor, prensa, generadores eléctricos, talleres de mantenimiento, la Internet, estaciones radiales, lápices, papel, archivadores, calculadoras y fotocopiadoras, y la lista podría ser más larga. Lo irónico es que la mayoría de los creyentes locales que no tienen estas herramientas tampoco se dan cuenta de su importancia. Piensan que no son capaces de usar tales herramientas, que no son capaces de mantenerlas y que no son capaces de darse el lujo de tenerlas. La razón por la que creen esto es que usualmente la gente que usa estas herramientas cree que las personas tribales no pueden usar las herramientas.

La tecnología en el reino de Dios no es un fin en sí. Es un medio para llevar el ofrecimiento de salvación de Cristo a todos en todas partes. Es un ofrecimiento por el cual ya ha pagado. Es una tragedia para aquellos que no saben que puede ser suyo tan sólo con pedirlo. Casi mil millones de personas necesitan saber que la vida va más allá del final del camino. Las mejores personas que pueden alcanzarlos ya están allí. Las herramientas y el entrenamiento apropiado generalmente no lo son. Pero lo pueden ser si trabajamos juntos para diseñarlos, producirlos y ¡luego entrenar a gente para que los use!



CAPÍTULO SIETE

MÁS DE LO QUE SABE SOBRE LOS ASUNTOS FINANCIEROS

¡MUCHO DINERO PUEDE CAUSAR MÁS DAÑO QUE EL TENER MUY POCO!

Con respecto al dinero he llegado a la conclusión que es muy parecido a la medicina. En realidad la medicina es veneno a menos que sea tomada en las dosis correctas en intervalos precisos en un período de tiempo específico.

De hecho, tener mucho dinero es más a menudo la causa de fracaso en la misión que el tener muy poco. Estos son dos escenarios diferentes que vienen de un deseo genuino de ayudar a los necesitados; uno es real y el otro hipotético.

LAS TRES ÁREAS VITALES
Hay tres áreas primarias que un nuevo cuerpo de creyentes tiene que desarrollar antes que puedan ser destetados de la leche de “sustento” provista por los foráneos. Al punto del destete ellos deberían ser capaces de

  • Llevar a otros a Cristo (propagándose por sí solos).
  • Organizar y controlar sus propios asuntos (gobernándose por sí solos).
  • Sustentar su propio ministerio (sustentándose por sí solos).

De estos tres retos, llegar a sustentarse por sí solos usualmente es el obstáculo más grande a vencer para la mayoría de las congregaciones de nuevos creyentes en países en vías de desarrollo.



Tres formas de romper la dependencia financiera:

1. Diseñe y produzca equipo que sea práctico y asequible.
2. Limite lo que le damos a nuestros hermanos y hermanas locales a solamente lo que realmente necesitan (no lo que nosotros necesitaríamos para hacernos felices si fuéramos ellos).
3. Viva lo más parecido a ellos. (Esto podría hacer que sea difícil que permanezcamos mucho tiempo, lo cual podría ser una buena defensa contra el permanecer demasiado tiempo).

Job 41:11 dice que “todo lo que está debajo del cielo” le pertenece a Dios, y Deuteronomio 8:18 dice que Dios “da la capacidad de producir riquezas.” La sabiduría convencional dice que la forma de avanzar es levantarse temprano y quedarse hasta tarde, pero Salmos 127:2 sugiere que ese esfuerzo extra es inútil a menos que Dios se encuentre involucrado. En 1 Corintios 4:1-2 somos identificados como administradores de Dios; nos ha confiado sus ministerios y los recursos para llevar a cabo Su comisión para decirle a todos en todas partes que el pecado los está matando y que tiene un antídoto gratis y disponible para ellos.

Sólo somos administradores que seremos contados por responsables por cómo lo usamos para hacer lo que Dios nos ha pedido hacer. Después de mucha experiencia, estamos comenzando a darnos cuenta que nuestros esfuerzos por construir iglesias cristianas locales en el extranjero frecuentemente son un tiro por la culata. Terminamos construyendo nuestra propia iglesia en países extranjeros y luego somos adheridos sustentándola por siempre.

Podríamos gastar los recursos que Dios nos ha dado para enseñar a los creyentes locales a cómo propagarse, gobernarse y sustentarse por sí solos. Después de todo, realmente no nos necesitan. Pero realmente nunca nos necesitaron en primer lugar; necesitaron a Cristo.

CAPÍTULO OCHO

¿ESTAMOS EN EL CAMINO CORRECTO?

¡TENEMOS QUE HACER LA VOLUNTAD DE DIOS, A LA MANERA DE DIOS!

¿TENEMOS EL MÉTODO CORRECTO?
Él nos ha dado varios dones, los cuales son todos necesarios en Su servicio e intenta que trabajemos unidos. Para hacer eso tenemos que tener una estrategia en la que estemos de acuerdo. Necesitamos estar yendo por el mismo camino que necesita estar en la dirección correcta. Dios no sólo nos ha dicho qué hacer en el área de misiones, sino también cómo hacerlo. Nos ha dado la dirección suficiente para estar seguros que tomemos el camino correcto. Desafortunadamente se ha convertido políticamente incorrecto en nuestra cultura cristiana el discutir sobre métodos de misión fallidos porque podrían reflejarse negativamente en lo que otra organización o misionero está haciendo.

Entonces somos siervos y administradores, ¿pero cuál es el plan de Dios para las misiones? ¿Cómo encontramos el método correcto? ¿Dónde comienza?


En nuestro esfuerzo por compartir la esperanza para esta vida y para la eternidad, asegurémonos que estamos en el camino correcto y que estamos yendo en la dirección correcta. No intentemos hacer lo que sólo Dios puede hacer, y no olvidemos que es sólo a través del poder del Espíritu Santo que podemos hacer todo. La Biblia es nuestro manual para las misiones. Cuando nuestras instrucciones son específicas, necesitamos seguirlas cuidadosamente. Cuando nuestras instrucciones nos dejan espacio para nuestra propia aportación, necesitamos recordar que nuestro rol es de siervos y administradores, no de ejecutivos.  Y debemos recordar que cuando llevamos a cabo nuestra comisión venida de Cristo, estamos trabajando en contra de los intereses del diablo. Él es un gran mentiroso y engañador. No debería sorprendernos que sea muy difícil hacer la voluntad de Dios a la manera de Dios. El enemigo desesperadamente quiere que no hagamos eso porque obra en contra de sus intereses.

Todos los creyentes son un cuerpo con una cabeza, Jesucristo. No deberíamos dividirnos por “clubes” individuales a los que pertenecemos dentro de un cuerpo. Tampoco deberíamos dividirnos por la raza o la cultura, sino permitamos que cada miembro de la familia trabaje donde pueda ser más eficaz. Eso significa que cuando sea posible, los creyentes deberían trabajar dentro de su propia cultura. La excepción a esta regla es la necesidad que el mensaje y la iglesia necesiten ser plantadas en cada grupo de personas donde todavía no existe. Eso requiere que misioneros de otro lugar vayan y requiere que muchos más los entrenen, equipen y envíen.

El propósito de las misiones no es evangelizar el mundo. Ese es el propósito de toda la iglesia cristiana. El propósito de las misiones es plantar la iglesia donde no existe para que entonces pueda evangelizar su propio mundo.

CAPÍTULO NUEVE

LA FABRICACIÓN DE VENENO TIENE SUS TRADICIONES,
TAN IGUAL COMO LAS MISIONES.

LOS MÉTODOS DE MISIONES –
¡ÉSTA NO ES LA FORMA EN QUE SIEMPRE SE HA HECHO!

METODO MISIONERO DE PABLO
Pablo dejó a los nuevos creyentes para que se paren por sí solos cuando supo que estaban listos, no cuando él o ellos sintieron que estaban listos. El objetivo de las misiones es plantar una iglesia local que se propague, gobierne y sustente por sí sola. Lo más importante que podemos hacer espiritualmente es ayudar con la parte que más se carece. Si necesitan trabajos, comience un negocio para ellos; no les construya una iglesia o un seminario.

Buen método de misiones:
Conozca-Vaya-Muestre-Váyase
Conozca a Dios.
Vaya donde no es conocido.
Muéstreles cómo seguir a Dios.
Váyase – salga para comenzar el proceso otra vez en otro lugar.

Las misiones son el andamio que ayuda a construir la iglesia local. Son temporales y nunca deberían recibir cemento en algún lugar.

Cuando todo está dicho y hecho, las iglesias que plantan las misiones deberían ser capaces de crecer, prosperar y multiplicarse por sí solas. Cuando se emplean los métodos correctos de plantación, ocurre y puede ocurrir muy rápidamente. A lo largo de ese camino, aquí presentamos unas cuantas formas simples de recordar la misma estrategia misionera que Pablo implementó:
·         Déle a la gente un pescado espiritual, enséñeles a pescar, y enséñeles a que enseñen a otros a pescar.
·         La multiplicación, no la adición, es el único camino por el cual podemos cumplir nuestra comisión.
·         Las misiones son el andamio que ayuda a construir la iglesia local. Es temporal y nunca debería recibir cemento en algún lugar.
·         Conozca-Vaya-Muestre-Váyase: Conozca a Dios, Vaya donde no es conocido, Muéstreles cómo seguir a Dios y luego váyase – salga para comenzar el proceso otra vez en otro lugar.
·         No haga nada por creyentes en otro grupo de personas que ellos pueden y deberían hacer por sí mismos. Es muy caro, hay muchos otros lugares que desesperadamente necesitan ayuda, y además hace que la iglesia local sea dependiente – lo cual es frecuentemente fatal.
·         La Gran Comisión no es un deporte de espectáculo. Ningún creyente debería estar sentado en las graderías observando.
·         El objetivo de las misiones es plantar una iglesia local que se propague, gobierne y sustente por sí sola. Lo más importante que podemos hacer espiritualmente es ayudar con la parte que más se carece. Si necesitan trabajos, comience un negocio para ellos; no les construya una iglesia o un seminario.
·         La Gran Comisión es como una carrera de postas. Las misiones corren la primera vuelta. Los creyentes locales deberían tomar la posta desde allí, pasándola a otros que vendrán después de ellos.
·         Los creyentes locales no necesitan ser como nosotros. Ellos necesitan ser como Jesús, y el Espíritu Santo les ayuda a hacerlo.

CAPÍTULO DIEZ

CONVIRTIÉNDOSE EN UN HÉROE DE LA FE

NO SE NECESITAN SUPERESTRELLAS; ¡DIOS USA HOMBRES Y MUJERES COMUNES CON UN COMPROMISO NO COMÚN!

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El secreto para ser usado por Dios:
· Ame a Jesús con todo su corazón.
· Confíe en Él completamente.
· Aprenda a perseverar.

Si quiere ser un héroe de la fe, es vitalmente importante que recuerde esto: Convertirse en héroe no depende de quién es: Depende de lo que deje que Dios haga con usted (su misión), del por qué lo hace (su motivo) y de para quién lo hace (su amo). ¡Puede ser un héroe de la fe!